Esta porción no sólo de tiempo, sino también de espacio, -memento mori- estructura del mundo de uso talismánico, emocional y mágico, lo que mi ojo no ve, esa visión fracturada-desconcertante-inquietante que hoy me lo ofrece esa cámara de mirada ajena y que mis propios ojos, ciegos, no pueden ver.
Ni Steinlen con el Gato Negro, ni el mismo Rodolphe Salis –su propietario- imaginaron ser el escenario para tu desnudez; ni McDowell siendo Alex, con su penetrante mirada a la Clockwork Orange, convertido en guardian y voyeur -al mismo tiempo- para(de) tu ser.
Habitación cinema con grácil silueta y fusión cromática para erótica mirada que desnudas sin pretender.
La foto. Esta es la superficie. Ahora pienso, o más bien siento, intuyo y me pregunto: ¿Qué hay más allá? ¿Cómo debe ser la realidad, si ésta es solamente su apariencia? La foto, fragmento del mundo… ¡ah!
1 comentario:
La foto.
Esta porción no sólo de tiempo,
sino también de espacio,
-memento mori-
estructura del mundo de uso talismánico,
emocional y mágico,
lo que mi ojo no ve,
esa visión fracturada-desconcertante-inquietante
que hoy me lo ofrece esa cámara de mirada ajena
y que mis propios ojos, ciegos,
no pueden ver.
Ni Steinlen con el Gato Negro,
ni el mismo Rodolphe Salis –su propietario-
imaginaron ser el escenario para tu desnudez;
ni McDowell siendo Alex,
con su penetrante mirada a la Clockwork Orange,
convertido en guardian y voyeur -al mismo tiempo-
para(de) tu ser.
Habitación cinema
con grácil silueta y fusión cromática
para erótica mirada
que desnudas sin pretender.
La foto. Esta es la superficie.
Ahora pienso, o más bien siento,
intuyo y me pregunto:
¿Qué hay más allá?
¿Cómo debe ser la realidad,
si ésta es solamente su apariencia?
La foto, fragmento del mundo… ¡ah!
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